jueves, 8 de marzo de 2012

Amiga

Corrimos por el patio del colegio gritando y saltando porque vimos un MS en una de nuestras pruebas, hicimos que la kiosquera perdiera tiempo mientras pensábamos cuantas golosinas íbamos a comprar con nuestra pequeña fortuna (dos pesos). Nos vimos tan diferentes, pero tan parecidas. Tan opuestas y tan complementarias.
Cantamos a los gritos esa canción que nos identificaba, bailamos coreografías inventadas en noches de insomnio, jugamos a hablar en frente de una cámara y decir estupideces, miramos películas que no nos dejaban dormir y nos pusimos coloradas hablando de chicos.
Lloramos por nuestro primer amor, sufrimos abrazadas escuchando una canción que se nos clavaba en el pecho, nos sacamos fotos absurdas frente a un espejo, nos hicimos cortes de pelo horribles para combinar con la época, caminamos por la calle riéndonos de todo: Hicimos que la gente nos mire como si estuviéramos locas.
Tomamos hasta marearnos... ya no sabíamos donde estaba el piso; fumamos miles de cigarrillos en una noche porque teníamos mal de amores, nos peleamos y nos amigamos quinientas veces, dejamos de hablar de chicos para pasar a hablar de "El hombre perfecto", nos paramos en el medio de una pista a cantar y bailar nuestra canción. 
¿Te cuento un secreto? Seguimos siendo las mismas de siempre, con 9 o con 18 años.

Gracias mejor amiga, te amo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario