sábado, 29 de octubre de 2011

"Big girls don't cry"

Entendí que hay veces que la vida te juega de malas maneras, que no es justa, que no te sabe valorar, que te paga de la peor forma. Te sentís en el fondo de un abismo, sin sogas para trepar, ni cianuro para tomar. Días en los que te miras al espejo y no miras banalidades solamente te miras a vos preguntando "¿Por qué a mi?". Momentos en que pensas que la vida es perra.
También entendí "Big Girls Don't Cry", las chicas grandes no lloran. Fergie nos quiere decir que a los peores problemas hay que enfrentarlos con la frente en alto y el mentón derecho... con la nariz parada. ¿Sabes por qué? Porque todo va a estar bien. 
Llorá, reí, viví, amá.


No bajes los brazos. En los peores momentos, levantalos.

viernes, 21 de octubre de 2011

Se busca co-protagonista

"Yo no me enamoro" dije todos los días de mi vida, y es verdad. No soy de esas que saben lo que es enamorarse, más bien soy de esas que se obsesionan al estilo "berrinches de nena chiquita".
"No quiero enamorarme" MENTIRA.  Es verdad, no me enamoré nunca, pero quiero estar enamorada. Quiero que mi vida esté llena de palabritas cursis, ositos de peluche con "te amo" escritos, cartitas tiernas, papeles con promesas al estilo "X 100pre juntos" (así con el X y el 100). Quiero todo eso en mi vida, quiero cumplir meses y que me den su campera cuando me vean con frío.
Ese romance al mejor estilo Hollywood me hizo tal lobotomía que ahora vivo cada minuto esperando que Tom Hanks me mande un e-mail, que Leonardo Di Caprio me invite a navegar o que Noah me diga que no le importa que sea la mujer más pesada quiere estar conmigo igual. Escribiría cosas románticas en mi diario íntimo y se las leería a mis nietos o a cualquier pobre cristiano para aburrirlo con mi hermosa vida feliz.
La necesidad de encontrar a mi co-protagonista de comedia romántica (yo la protagonista, nunca menos) se me volvió tan enfermizamente necesaria que perdí la noción de la coherencia. Ahora soy la Bridget Jones de mi propia vida, creo que tengo que encontrar el amor o vivir sola. Fíjense el tamaño de mis problemas mentales: "vivir sola", tengo 17 años y me preocupo por los 60 años que me quedan por delante.
Hollywood, se te viene un juicio por daños psicológicos.
Ok, anotame un par de problemitas más en la lista. Si no hay lugar al frente, anotalos del otro lado, no hay problema.
Me expongo tanto cuando busco enamorarme al estilo Georgina de "Chiquititas", que termino sufriendo como una viuda de guerra: Lloro a la mañana, a la tarde, a la noche, feriados y vacaciones. Se me va el hambre: no como. Como: vomito de los nervios. (Nunca tanto como para ser flaquita, no tengo esa suerte).
Voy con mi corazón en las manos y se lo van pasando. En el camino se cae, se raya, se corta y se rompe; "uh, me parece que se rompió". Nunca van a leer el cartelito de "FRÁGIL" y a manejarse con cuidado. Después me quedo yo con esa cosa amorfa y cortada que, ponele, se llama corazón. ¿Qué hago con esto? ¿Me lo como?
Lo patético es que todo se termina sin siquiera haber empezado ¿Y yo? yo ya tenía el vestido de novia, la fecha en el civil, el cura para la ceremonia, los nombres para nuestros 3 hijos... todo.
Y ahí me quedo yo, como Drew Barrymore en "Jamás besada", sentada esperando al ideal quien, para mi, va a aparecer siempre que me agarre una de esas lindas obsesiones con alguien que me diga cosas lindas.
Me doy lástima....Me abrazaría, pero no me gusta juntarme con gente como yo.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Heridas que sanar, cicatrices que besar

Chris Martin me canta "Fix you".
¿Nunca sintieron que volvían a vivir un momento una y otra vez? Que cerraban los ojos y se veían ahí, con los mismos sentimientos y con la misma expresión. Abrían los ojos y la escena había cambiado. Se preguntaron si era real, tal vez había sido un mal sueño. Pero el dolor no se había ido, y la cicatriz seguía ahí... recordandonos que el golpe existió.
Una vez un sabio me dijo que los fuertes se hacen de golpes y cicatrices, "ningún fuerte es invencible, todos tienen historias de batallas y trofeos de guerra... todos tienen cicatrices y un corazón que aún no sana".
Nos tropezamos, nos caemos y nos volvemos a levantar, es parte de la naturaleza humana. Pero a veces nos cansamos y el dolor de la caída se hace enorme hasta que nos abraza sin dejarnos espacio para movernos. Nos tironea del brazo hasta dejarnos en el piso, inmóviles y sin aliento.
"When you try your best but you don't succeed, when you get what you want but not what you need, when you feel so tired but you can't sleep... stuck in reverse". Cuando el dolor es tan grande que no lo podes explicar, te quedas esperando una señal desde el cielo, desde la tierra. Una señal que no aparece. Cuando la hoja se queda blanca, sin nada. Cuando nada te llena, eso es una herida.
Todas las heridas sanan, incluso las más graves. Algunas dejan cicatrices, otras marcas imperceptibles, otras no dejan ni un rastro.
Las cicatrices nos cuentan una historia: Un amor no correspondido, un corazón roto, un alma en pena, un grito de auxilio. Llevar una cicatriz es una prueba de una batalla. Algo con lo que se vive siempre y que nos va a llevar a revivir ese momento una y otra vez: Ese momento en que la herida se empezó a abrir. Cuando se escuchó el ruido de nuestro corazón estrellandose contra el asfalto.

"Lights will guide you home and ignite your bones and I will try to fix you"

Pasa el tiempo y crecemos. Maduramos y aprendemos que la vida tiene algo para enseñarnos: Errores para no repetir, caminos que no hay que tomar. Heridas que sanar, cicatrices que besar.